El uso de los servicios publicitarios de Google en manos de un niño de 12 años y su amigo de 15 acaba de ser noticia debido a un curioso malentendido. Como se sabe, estos servicios del gigante de Internet se hallan restringidos a mayores de edad, pero parece que en este caso los protagonistas consiguieron saltarse las medidas de seguridad con consecuencias que pudieron ser fatales económicamente.
El niño solo quería ser youtuberEn efecto, un niño alicantino de 12 años, que quería introducirse en el mundo de los youtubers, contrató el servicio de Google
AdWords para ganar dinero insertando publicidad en sus vídeos de YouTube, sin darse cuenta de que lo estaba haciendo era pagar por publicitar su sitio web. De esta manera, junto con un amigo, empezaron a gastar dinero hasta alcanzar los 100.000€ de deuda en su cuenta.
Este conocido servicio de publicidad de Google promociona sitios web de todo tipo por medio de anuncios pagados por el usuario, que quiere aparecer en posiciones privilegiadas como resultado de búsquedas de palabras clave determinadas y afianzar su posición en un determinado sector. Se trata de un modo efectivo pero a veces costoso de promocionar un sitio web, que se gestiona decidiendo en todo momento cuánto se quiere invertir en la campaña publicitaria.
La sorpresa de los padres de este niño de Torrevieja (Alicante) fue, como cabe esperar, mayúscula, por no hablar del susto que debieron sufrir al encontrarse de pronto con una deuda de tal magnitud. El niño de 12 años fue capaz de registrarse en este servicio de Google, introduciendo un correo electrónico, una cuenta bancaria y un sitio web a promocionar por medio de la publicidad.
Una suma total de casi 100.000 eurosDesde Agosto de este año empezarían a llegar cargos de 50 euros a dicha cuenta, hasta alcanzar a un ritmo vertiginoso los casi
100.000 euros del total. Inmediatamente, los padres procedieron a cerrar el canal de este precoz youtuber para evitar que la cantidad siguiera creciendo. Según explicó el niño, su intención era la de obtener cierta suma de dinero para comprar instrumentos musicales junto con su amigo de 15 años, con el que tiene una banda llamada "Los salerosos de Torrevieja".
Por suerte para la familia, Google ha lanzado un comunicado anunciando la cancelación sin costes de la cuenta, principalmente porque tratándose de un menor de edad no quedan claras sus responsabilidades como firmante de un contrato de este tipo, que en realidad nunca debió formalizarse. Y es que lo normal es que hubiera tenido que pasar por un control de edad o, cuando menos, aportar un DNI. En cualquier caso, no cabe duda de que cualquier reclamación a la familia de este niño habría resultado en mala prensa para el gigante de Internet.