El esplendor de la historia en la zona sur de la provincia La zona más al sur de la provincia contempla dos de sus comarcas principales, la Campiña y la Alcarria. La primera de ellas es la más austera en cuanto a construcciones. Sin embargo, se pueden destacar algunos lugares como Uceda, con su iglesia de la Virgen de la Varga, o el palacio de los Ramírez de Arellano de Marchamalo. Sin embargo, en la Alcarria crecen las opciones. En la zona más al sur, muy cerca de la frontera con Cuenca, Pastrana muestra su Palacio Ducal, frente a la plaza de la Hora, a poco metros de su colegiata. Muy cerca, en Zorita de los Canes, la Recópolis y su castillo muestran el esplendor de la localidad en dos épocas diferentes de la historia. Más hacia el norte pero continuando por la zona más al sur de la provincia, destacan principalmente tres localidades. En Torija, su castillo gobierna desde la torre del homenaje los campos que lo rodean. En Hita, su conjunto histórico recuerda la importancia que tuvo este lugar en el medievo, con su Arcipreste como gran baluarte. En Brihuega, sus murallas, sus iglesias y sus construcciones civiles hacen que el turista se encuentre con algo digno de fotografiar a cada paso.
La capital monumental Una mención aparte merece la capital, Guadalajara, donde mejor se puede sentir el paso de la historia. Su emblema principal es sin duda el Palacio del Infantado, pero no es el único. Lugares como el puente árabe recuerdan otros tiempos, así como el Torreón de Alvar Fáñez, la Concatedral de Santa María o el Panteón de la Condesa de la Vega del Pozo. Muestras, cada una de ellas, de cómo la ciudad ha continuado siendo importante ante el paso de los siglos y de los estilos artísticos. |