El presidente del PP, Mariano Rajoy, volvió este fin de semana a reunir a la cúpula del partido en un encuentro fuera de la agenda oficial organizado en Sigüenza. Allí, la dirección del PP analizó los datos de intención de voto pero, sobre todo, la información sociológica de las encuestas. Rajoy no comprende por qué los españoles siguen sin admitir que la situación económica es ahora mejor.
Según informa el diario El Mundo, análisis realizado por la dirección del PP el fin de semana en Sigüenza, donde también acudió el sociólogo Pedro Arriola, se vio reflejado ayer en varios de los puntos del discurso que Mariano Rajoy realizó ante el Comité Ejecutivo del partido. El presidente trasladó, según fuentes del PP, que en estos momentos los sondeos apuntan a que están por encima en intención de voto respecto a las elecciones europeas. En ellas el partido logró un 26%, muy lejos de sus expectativas. Este mal resultado encendió todas las luces rojas en la cuarta planta de Génova. Y siguen encendidas.
La dirección popular sigue perpleja por el escaso entusiasmo de los españoles muestran con la mejora de la economía
Rajoy aseguró que hay que centrarse en la recuperación, para las autonómicas y municipales, del voto que se ha quedado en casa. El guión escrito de que la esperada recuperación económica permitiría al partido purificarse de todas las duras decisiones aprobadas en los primeros años de legislatura no acaba de cumplirse. La dirección popular sigue perpleja por el escaso entusiasmo que los españoles muestran en las encuestas con la mejora de la economía española.
Con las elecciones a menos de ocho meses, Rajoy pidió ayer a los dirigentes del Comité Ejecutivo un esfuerzo en la explicación de la realidad económica. Un plus de pedagogía para cambiar la visión ciudadana. Con este propósito, el PP celebrará en las próximas semanas varios actos de carácter económico, según avanzó el vicesecretario de Organización, Carlos Floriano. El presidente manifestó en su intervención que hay que explicar a la gente qué habría pasado si hubiera habido rescate. Y machacar también, según fuentes del partido, en los temas sociales, en que no se han congelado las pensiones ni se ha destrozado la sanidad y la educación, como sostiene la oposición.
Aviso a los barones: 'Las elecciones no se ganan inaugurando carreteras'
La dirección del partido -y sobre todo Rajoy- sigue convencida de la importancia de las cuestiones económicas en el voto. «Tenemos relato, discurso y resultados», aseguró. Pero, pese a su balance, volvió a hacer un llamamiento sobre el cumplimiento del déficit público y su importancia para la credibilidad de España, dirigido claramente a sus barones. «Las elecciones no se ganan inaugurando carreteras», indicó.
En un periodo de cambios sociales y políticos feroz, el PP se agarra a que sigue siendo la fuerza más votada. Pero la angustia sigue siendo muy alta con datos sólo un poco mejores que los de las europeas.
En esta tesitura, lo que menos desea el presidente es que el PP se enfrasque en el habitual ruido previo a la elección de los candidatos autonómicos y municipales. Por ello, ayer afirmó que no hay prisa para designarlos y apeló a los plazos de la ley electoral, que sitúa el límite en abril.
No obstante, adelantó que se elegirán por fases, según convenga a los intereses del partido. Como a finales de enero o principios de febrero está prevista una convención nacional, algunos miembros del Comité Nacional entendieron que entonces estarán resueltas las plazas más discutidas, como Madrid o Valencia. Otras fuentes, en cambio, apuntan a que tras sus palabras se dispone a demorar la decisión al máximo, como hizo con Miguel Arias-Cañete. Esta tesis tiene otras derivadas, ya que hay quien sostiene que tras el resultado de las europeas no puede actuar como entonces. Al margen de las palabras de ayer, su propósito era resolver en octubre los lugares más complicados.
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