Así lo considera una experta en seguridad informática noruega llamada Marte Løge, quien ha realizado un estudio sobre los sistemas de desbloqueo más utilizados por los usuarios de nuevas tecnologías. Para ello analizó más de 4.000 ejemplos para la elaboración de una tesis universitaria.
Y las conclusiones no dejan sorpresas: los usuarios son demasiados predecibles a la hora de pensar en una contraseña para los servicios de internet y tecnológicos utilizados.
El informe detalla que el 77% de los usuarios estudiados empieza a dibujar el patrón desde una de las cuatro esquinas, siendo el 44% de los casos desde la parte superior izquierda. Además, se estima que gran parte de las combinaciones permitidas quedan sin descubrirse dado que la mayoría de los usuarios utiliza cuatro nodos para configurar el patrón de desbloqueo, otro factor que hace más fácil de adivinar por los ciberdelincuentes pues las combinaciones de cuatro nodos son mucho menores que las de cinco o de seis que se considera que ya ofrecen más garantías de ser menos vulnerables.
Si además utilizamos las letras de nuestro nombre o similares, como en muchos casos se da, cualquiera que robe un bolso puede sacar la clave. Así que lo mejor será que nos comamos un poco el coco y cambiemos de patrón, preferiblemente por alguno que no sea ni siquiera una letra.
No seamos perezosos, en nuestro móvil está toda nuestra vida digital. ¿Acaso no merece la pena protegerla?