Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de California en Berkeley y de la Universidad de Columbia (Estados Unidos) y publicado en la revista ‘Scientific Reports’, que compara las temperaturas actuales con las proyecciones de modelos con 2ºC más en la Tierra a finales de este siglo, esta es la dramática situación a la que nos enfrentamos en los escenarios más optimistas.
Los autores, Solomon Hsiang y Adam Sobel, encontraron que “los movimientos de población podrían ser dramáticos” y prevén un importante declive en zonas de México, América Central, África, India y otros lugares tropicales si seres humanos o animales se desplazan debido al calentamiento global.
En su análisis, los investigadores utilizaron un modelo para demostrar cómo la dinámica del clima en los trópicos puede ampliar drásticamente las consecuencias del cambio climático, ya que éstas se experimentan sobre el suelo, de manera que incluso los pequeños cambios pueden tener efectos dramáticos.
"No estamos haciendo predicciones específicas acerca de los patrones de migración de las especies individuales, pero la limitación geofísica es que como los trópicos se calientan más habrá que viajar muy lejos, dejando esencialmente los trópicos, para buscar refresco", apunta Sobel.
Debido a que los trópicos son uniformemente cálidos, cuando hay un pequeño aumento térmico las poblaciones deben moverse para encontrar alivio. Hsiang lo explica con una analogía: "Imagine que tiene un presupuesto fijo que puede gastar en su apartamento y los alquileres son los mismos en todo su vecindario Si todos los alquileres suben, incluso por sólo un poco, puede que tenga que moverse muy lejos para encontrar un nuevo lugar que se pueda permitir".
Hsiang y Sobel describen los desplazamientos relacionados con el clima en los trópicos como "una evacuación casi total de la banda ecuatorial" que podría afectar a los ecosistemas, así como al bienestar humano.
Los científicos indican que algunas poblaciones oceánicas y continentales tendrían que desplazarse hasta 1.000 kilómetros o más para permanecer dentro de su "presupuesto de temperatura", lo que acarrearía que los bordes más fríos de los trópicos tendrían al menos un 300% más de personas, con lo que brotarían enfermedades y conflictos por los recursos.
"Sabemos que las personas y las especies de todo tipo se mueven por todo tipo de razones, no sólo para mantenerse a la misma temperatura. Al mismo tiempo, la uniformidad de temperaturas tropicales es un hecho básico de la estructura de la temperatura de la Tierra y seguirá con los cambios climáticos", recalca Sobel.
Hsiang indica que, en este escenario, puede ocurrir que haya personas y animales que no puedan desplazarse, con lo que tendrían que “sufrir las consecuencias de un nuevo clima”. "Esto puede suceder cuando los migrantes humanos se encuentran con fronteras políticas o cuando las especies no pueden moverse físicamente lo suficientemente rápido". El reciente blanqueamiento de la Gran Barrera de Coral (Australia) es un ejemplo de ello.