Redacción | Domingo 26 de febrero de 2017
Los agalloneros degustaron gachas, migas y los chorizos y lomos que se embutieron poco antes de navidades
Día festivo el de ayer en el municipio de Tamajón. Por la mañana, un centenar de agalloneros retomaron la labor que llevaran a cabo unos días antes de las navidades, cuando se reunieron al calor del fuego en el local social del Ayuntamiento en la calle de En Medio, para revivir las tradiciones de la matanza.
Entonces, además de degustar el menú que era típico de aquella época del año antaño, también embutieron los chorizos, según la fórmula tradicional y con “el secreto de la abuela” como ingrediente, como recordaban algunos, y pusieron los lomos en el especial aliño tamajonero, que también tiene su aquel. Unos días después, los escurrieron bien y los frieron, para conservarlos en la olla. Ayer, daban buena cuenta de ellos en animada sobremesa y en otra jornada deliciosa.
Desde por la mañana pronto, los cocineros, entre los que se contaba el propio alcalde de Tamajón, Eugenio Esteban, se afanaban para completar el menú, basado primordialmente en los productos de la matanza, con unas migas y unas gachas. Y, si el ingrediente principal del embutido es el secreto de la abuela, el de las migas es “el cariño con el que las hacemos”, decía el regidor mientras les daba vueltas.
Al pan de Tamajón, picado y en remojo desde hace un par de noches y aromatizado con orégano, Esteban le unía la grasilla de la matanza, torreznos y lomo hecho trocitos. Para las gachas, se empleó la mitad de harina de almorta, y la otra mitad, de trigo, naturalmente mezclado con aceite de oliva.
A eso de la una y media, el ambiente en Tamajón era excepcional, con medio centenar de agalloneros disfrutando de un día extraordinario, soleado, en el que apetecía incluso la conversación al sol. Después del café, la mayoría de los presentes decidió acompañar la fiesta del carnaval de Almiruete.
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