Un software ERP es una herramienta informática que permite implementar el control y sistematización sobre todos los datos y procesos involucrados en la actividad de una empresa desde su propia producción hasta los costes y operaciones que debe realizar. El software de Geinfor es un buen ejemplo de ello y es, por lo mismo, una herramienta a todas luces revolucionaria y que es también de hecho una de las protagonistas de la revolución que ha dado como fruto la llamada Industria 4.0, una forma inteligente de controlar la producción y mejorar la competitividad de cualquier compañía. A continuación queremos hablarte de tres casos prácticos en los que un software ERP puede ayudar a tu empresa sea cual sea su sector, tamaño y características.
Supongamos el caso de una empresa dedicada a la distribución del metal dentro del sector siderúrgico. Este sector dispone de una alta competitividad y al mismo tiempo de una gran exigencia de calidad, por lo que el aprovechamiento de los recursos en él es un factor que debe ser muy tenido en cuenta a la hora de mejorar su productividad y capacidad para crecer y consolidarse dentro del mismo. Imaginemos el caso de una empresa de este tipo con plantas en diferentes puntos del país. Se trata, por ejemplo, de un fabricante de metales de precisión que requiere de hecho automatizar todo lo posible sus procesos.
Primero de todo, hay que decir que una de las características más importantes de los software ERP es su naturaleza modular. Eso quiere decir que pueden montarse "por bloques" en función del sector del que se trate en general y, de forma específica, según las características de la propia empresa. En el ejemplo que suministramos previamente a través de enlace podrás encontrar de hecho un software específico para el sector del metal.
El primer paso, por tanto, consiste en implementarlo en una planta. En ella se comienza por un control de la producción de cada equipo de trabajo y se mejora con ello su eficiencia gracias al registro de todos los materiales disponibles en el ERP y, al mismo tiempo, por la reducción de inventarios propios de dicho grupo. Lo mismo comienza a hacerse con cada uno de los grupos, por lo que después de ello contamos con toda la información de cada uno de los grupos de trabajo sistematizada y centralizada en un solo software en lugar de aislada y dispersa.
Por estar centralizada, podemos llevar a cabo su evaluación y tomar mejores decisiones como consecuencia de disponer de mejor información que, al mismo tiempo, está mucho más coordinada. Bajo dichos presupuestos podemos establecer un proceso de automatización desde el propio software para multitud de procesos con lo que podremos llevar a cabo una gestión mucho más eficaz e inteligente de todas las variables. Todo ello se traduce también en un ahorro de costes y en consecuencia en un mejor estado financiero de la empresa que de hecho es posible hacer que revierta sobre nuevas inversiones.
Como hemos dicho, una de las características de un software ERP es que permite una mayor coordinación y cohesión para una compañía. Esto vale para una sola planta como para, en nuestro caso práctico, para las diferentes plantas con las que cuenta la empresa, que podrán tener acceso al mismo software y actuar conjuntamente.
En este segundo caso, queremos hablar de una empresa que requiere de organizar y sistematizar todos sus pedidos por ser una distribuidora de mensajería y paquetería. En su caso, un control exhaustivo de las entradas y salidas de mercancías es crucial no solo en relación al número y volumen en el que estas se producen sino respecto a los tiempos en los que el flujo se produce, es decir, los tiempos en los que la distribución sucede.
En su caso, es fundamental establecer un control preciso sobre el estado de los pedidos y su puesta en marcha. Así, una de sus necesidades es precisamente lograr que no se estanque dicho flujo, por lo que debe implementar el control sobre la cadena de suministro para mejorar la respuesta de todo el proceso.
Lo primero que consigue un software ERP en su caso es mejorar la exactitud de la información para mejorar la calidad de las decisiones y poder introducir la variable del tiempo real en el desarrollo de la actividad empresarial. La introducción de un software ERP consigue, en consecuencia, eliminar la incertidumbre sobre cada una de las mercancías y conseguir un sistema integrado en el que el músculo de la empresa funciona de forma cohesionada y coordinada.
Esto repercute notablemente sobre los costes de distribución al conseguir que la misma sea mucho más eficaz gracias a poder optimizar los envíos y el tiempo en el que se producen. Al mismo tiempo, se produce una mejor gestión sobre las entradas y sobre el stock así como sobre los plazos y prioridades de envío de la empresa.
Naturalmente, esto repercute sobre la satisfacción de los clientes que, en el caso concreto de una empresa como esta dedicada a la distribución depende fundamentalmente del cumplimiento de los plazos y la supresión de errores en su cadena de distribución. De paso, se ha conseguido mejorar la coordinación con los propios clientes a través de la comunicación con ellos y de una mejor valoración de sus servicios como consecuencia de su satisfacción.
Un software ERP también puede ser muy beneficioso para empresas dedicadas a la oferta de servicios en lugar de la producción y distribución. Es decir, es una herramienta que puede dar cobertura a cualquier empresa incluidas las del sector terciario. En este caso, podemos hablar de una empresa de reservas de alojamientos hoteleros o actividades de ocio.
En su caso, llegan pedidos sobre servicios que deben ser gestionados eficazmente en relación a la coordinación que existe entre las reservas y el servicio concertado. Por ello, un software ERP centraliza y sistematiza todas las entradas de reservas y las coordina con una base de datos relacionada con las distintas ubicaciones y fechas.
De paso, coordina todos los departamentos relacionados con la actividad empresarial haciendo que puedan ofertar su actividad de una forma mucho más eficaz en el tiempo y en la calidad del servicio. Se contribuye a ahorrar en costes derivados en este sector en muchas ocasiones de las reclamaciones efectuadas por los clientes a consecuencia de un servicio defectuoso. De paso, se puede coordinar mucho mejor la actividad de empresas colaboradoras que son por ejemplo las que ofrecen los emplazamientos de reservas.