CSIF estima que la Junta de Page debería haber afrontado la contratación de "al menos 5.000 docentes"

A dos días del comienzo del regreso a las aulas en Castilla-La Mancha, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) expone la falta de personal, ratios elevadas, problemas de espacios, dificultades organizativas en recreos, aulas, comedor, extraescolares, planes de contingencia desfasados, instrucciones contradictorias… Estos son los principales problemas a los que se enfrentan docentes y también las familias que, en muchos casos, se consideran abandonados a su suerte por los responsables políticos ante el inicio del curso escolar.

En la región aún no se han incorporado a los centros educativos los 3.000 docentes anunciados por el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Es más, en este regreso a las aulas sólo habrá este miércoles un millar de docentes más que el curso pasado, mientras que todavía se desconoce cuándo se adjudicará el resto. Para CSIF, que considera insuficiente la bajada de ratios planteada, señala que la cifra de nuevas contrataciones para el presente curso escolar debería rondar, al menos, los 5.000 maestros y profesores para plantear una ratio de 15 alumnos por clase de acuerdo a las recomendaciones sanitarias, y más teniendo en cuenta que se ha producido la jubilación de 572 docentes.

Para CSIF ha faltado inversión en la educación pública de la región. El sindicato considera que se podrían haber instalado arcos de detección de temperatura corporal, alfombrillas desinfectantes y purificadores, además de habilitar más espacios públicos para los colegios que no puedan garantizar la distancia de seguridad. Asimismo, sigue habiendo falta de concreción y una enorme falta de coordinación: CSIF reclama al Sescam información sobre qué centros de salud son referentes y están asociados a determinados colegios e institutos, así como las instrucciones de trabajo a realizar.

ASESORAMIENTO Y VULNERABILIDAD
CSIF inicia una campaña para prestar apoyo y asesoría al personal docente ante la incertidumbre con la que inicia el curso y la falta de concreción en los planes de Gobierno y comunidades autónomas para el comienzo de las clases. Además, es muy importante tener en cuenta al personal de riesgo, ya sea por docentes con embarazo o con patologías previas que pueden agravarse con el Covid-19.

CSIF difundirá entre el profesorado un formulario para que los servicios de Prevención realicen una evaluación del puesto de trabajo y en su caso, se realice la correspondiente adaptación y se informe sobre las medidas de prevención y protección.

A duras penas, ante la falta de directrices claras, en muchos casos la dirección de los centros ha realizado una planificación del curso, también en colaboración con las AMPA, con mucha incertidumbre, falta de certezas y con toda la responsabilidad sobre sus hombros ante las consecuencias que pueda tener la evolución, aún muy incierta, de la pandemia.

Además, a día de hoy la Consejería de Educación aún no ha hecho público el resultado de las pruebas PCR a las que se han sometido los docentes de Castilla-La Mancha, un punto fundamental para abordar las bajas asociadas al COVID-19.

De entrada, los centros carecerán del apoyo de profesionales sanitarios con personal de enfermería escolar, como reclamó CSIF, que ayuden en el diagnóstico y toma de decisiones. Además, los equipos directivos y los ‘Coordinadores/as Covid’ de cada centro no han recibido todavía la formación prometida, figura que debería recaer en un personal sanitario o en personal de prevención de riesgos laborales.