El Colegio de Médicos de Guadalajara considera que el cambio en la organización de las agendas supone una importante sobrecarga de trabajo para la Atención Primaria

El Colegio de Médicos de Guadalajara quiere mostrar su apoyo a todos los compañeros de Atención Primaria por la situación en la que se encuentran como consecuencia del cambio en el modelo de atención ocasionado por la pandemia. Lo que más preocupan es la modificación de las agendas implantadas sin ningún tipo de negociación ni información con los profesionales de atención primaria. Tal y como explicaba el presidente del ICOMGU, Javier Balaguer Recena: “el diseño de las nuevas agendas se limita a cubrir la actividad asistencial, de manera que la actividad de investigación, docencia, formación y prevención de la salud quedan de nuevo arrinconadas, Retrocediendo a la época previa a la implantación de la atención primaria.

Si a esto sumamos el problema de tener que asumir la consulta los compañeros que faltan por vacaciones o baja laboral la sobrecarga asistencial será muy importante”.

Una situación que afecta a los médicos y a los usuarios y preocupa el Colegio de Médicos: “como consecuencia de todo esto se ha llegado a una situación límite con repercusión en primer lugar en el servicio que se da a los usuarios y en segundo lugar aumentando en los compañeros de primaria la sobrecarga tanto física como psicológica lo que sin duda puede agravar el cansancio que ya acumula los médicos de atención primaria como punto de entrada en nuestro sistema sanitario”.

Este cambio de organización en las agendas repercute en la organización del trabajo de los médicos de primaria, siendo ahora sus agendas aún más exigentes, por lo que desde el Colegio de Médicos se entiende que se debería contar al menos con la opinión de los profesionales o de sus representantes a la hora de emprender este cambio.

En este sentido el ICOMGU considera necesario que los servicios de prevención de riesgos laborales analicen la sobrecarga asistencial derivada de este cambio en la organización del trabajo y se compruebe si las nuevas agendas se ajustan a los estándares establecidos por las sociedades científicas. Todo ello, con el objetivo fundamental de contar con una atención primaria suficientemente dotada para cubrir las necesidades de la población general y el cuidado de la salud.