CULTURA

El tabú sobre la bipolaridad, sus causas y sus consecuencias queda en el olvido en 'Stigma'

Redacción | Jueves 07 de octubre de 2021
Andrea Dib Solari abre las puertas de su memoria de su alma a los lectores para recorrer los episodios más oscuros de su pasado y explicarles cómo es convivir con esta enfermedad

Un viaje sin control a través de una durísima infancia, una enfermedad mental y la ruptura de relaciones familiares son algunas de las difíciles vivencias que narra Andrea Dib Solari en Stigma (editorial Tregolam), su primera autobiografía novelada.

La autora desnuda su alma por completo y relata los episodios más terroríficos de su vida, desde los abusos que sufrió cuando era tan solo una niña, la mala relación con su familia, el exilio con el que creía el amor de su vida a Suecia o su internamiento en un centro neuropsiquiátrico tras diagnosticarle bipolaridad, entre otros.

"Algunos de los relatos más difíciles de escribir han sido mis abortos. A pesar de que han pasado décadas, la intensidad de mis sentimientos no ha disminuido.

El libro fue una terapia, efímera, en la que volqué mis pensamientos sobre papel. Las enfermedades síquicas siempre han sido tabúes en la sociedad. Un enigma, una locura.

Cuando uno se quiebra una extremidad, la gente nos comprende, pero si se quiebra el alma no, porque no se ve".

Con una sensibilidad y una crudeza arrolladoras, la escritora narra los abusos, los maltratos y las violaciones que sufrió de pequeña y que la llevaron a perder la inocencia desde una edad temprana, en la que también descubrió las falsas amistades, el odio de una madre en la que nunca pudo refugiarse y la violencia disfrazada de amor que provocó que muchas de sus relaciones fracasaran.

"Siento tal vergüenza de escribir sobre mi niñez o carencia de ella que no me atrevo leer mi libro. Eso es lo que experimentamos las víctimas de los pedófilos. Sentir que somos los culpables de provocar ciertas situaciones. Es muy común que sean un amigo de la familia.

Nos sentimos desamparados, nadie nos protege y ni nos escucha. Me atrevería a afirmar que es uno de los factores que causan la bipolaridad".

Andrea Dib Solari comienza su relato en el momento en el que la internan en un neuropsiquiátrico de Suecia, y critica de este modo la poca atención y el desconocimiento que se otorgan a las enfermedades mentales, un tema que continúa siendo tabú en la sociedad. A través de su bipolaridad, la autora explica qué siente y cómo afecta esta a sí misma y a su entorno, y la etapa de locura y autodestrucción que la llevan a refugiarse en las pastillas y en los cuchillos como método de escape para sus episodios de manía y de depresión.

En Stigma, que data de cuarenta años de historia familiar entre la Argentina natal de la escritora y el país en el que vive actualmente, Suecia, también detalla la mala relación con su madre, la cual nunca hizo nada para impedir los abusos que su hija sufría, así como las malas relaciones amorosas de las que solo obtuvo lo único que debería ser lo más importante para cualquier madre: sus hijos. Estos supondrán un punto de inflexión en el que la autora perdonará a su madre, pero pierde a uno de sus hijos, que la culpa de sus problemas a causa de su enfermedad.

La constante lucha de la autora contra sus problemas de salud y la pérdida de su identidad derivan en el miedo de aferrarse a alguien a quien ama por temor a volverse dependiente de esa persona, y los lectores podrán apreciar los impulsos y miedos que sufren las personas que padecen esta enfermedad y, en consecuencia, cómo afecta a su manera de actuar.

"Cuando estoy en una situación conflictiva siento que me van a abandonar. Dedico muchas horas, días incluso, culpándome de que, si hubiese hecho las cosas de otra manera, estaría en harmonía conmigo misma. Muchos bipolares se exponen a situaciones autodestructivas, peligrosas, de alto riesgo. Creamos una dependencia con nuestra pareja porque tenemos miedo de ser abandonados. ¿Quién nos va a querer? Hemos escuchado durante la infancia que no valemos nada, que somos de carácter débil porque nos ponemos tristes o lloramos cuando nos sentimos culpados".

La manera tan desgarradora que tiene de exponer el profundo de depresión, abstracción, locura y autodestrucción consigue poner la piel de gallina a los lectores, que sentirán con horror el dolor de esta mujer y esta madre que lucha contra el peor enemigo que existe: uno mismo.

La novela de Andrea Dib Solari ya está disponible en las librerías online para aquellos lectores que busquen una historia real y sensible.


Noticias relacionadas