Las I Jornadas sobre el Estratotipo GSSP de Fuentelsaz dieron cita a más de 200 personas

Las I Jornadas sobre el Estratotipo GSSP de Fuentelsaz dieron cita a más de 200 personas, vecinos del municipio y de los pueblos de su entorno, interesados en conocer la importancia de este emplazamiento, único en el mundo, así como a todas las partes implicadas en su protección: La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, a través del director de la Delegación de Servicios en Molina, Alfredo Barra; la Diputación Provincial, mediante la diputada de Medio Ambiente y alcaldesa de Mazarete, Lucía Enjuto, y la diputada socialista y alcaldesa de Corduente, Ana Isabel Fernández Gaitán; el Ayuntamiento de Fuentelsaz, con toda la corporación municipal, con su alcalde a la cabeza, Ismael Pardos; el Geoparque de la Comarca de Molina-Alto Tajo, a través de su gerente, Juan Manuel Monasterio, y la comunidad científica, a partir de Luis Carcavilla del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y los investigadores Alfonso Sopeña y Yolanda Sánchez Moya, de la Universidad Complutense de Madrid (UCM). Los “padres del Estratotipo”, Antonio Goy y Marisol Ureta (UCM), a quienes por diversas circunstancias, les resultó imposible participar en estas I Jornadas, se disculparon por su ausencia, del mismo modo que el delegado de la Junta en Guadalajara, Alberto Rojo Blas.

De esta manera, las I Jornadas sobre el Estratotipo GSSP de Fuentelsaz sirvieron para despejar las dudas de los vecinos de la localidad, hacerles conscientes del valioso patrimonio geológico que atesoran y de la necesidad de protegerlo y preservarlo, así como para volver a recordar a las partes implicadas la importancia de abordar cuanto antes su protección.

En este sentido, el Ayuntamiento de Fuentelsaz enviará, próximamente, una carta a todos los propietarios de las parcelas que conforman este emplazamiento, informándoles del inicio del proceso para su protección y lo que ello implica. La intención es que el estratotipo sea declarado Monumento Natural antes de septiembre de 2016, cuando se celebran las Jornadas de Paleontología de la Sociedad Española de Paleontología en Molina de Aragón, con el fin de hacer coincidir su inauguración con este importante evento.

La profesora de la UCM e investigadora de prestigio internacional, Yolanda Sánchez Moya, fue la responsable de abrir las jornadas, explicando qué es un estratotipo y por qué el entorno de Fuentelsaz es tan importante para la comunidad científica. En este sentido recordó que la Tierra tiene 4.600 millones de años de vida y que, para estudiar su historia, los geólogos cuentan con algunas herramientas como los periodos geológicos. La Comisión Internacional de Estratigrafía (ICS), integrada en la Unión Internacional de Ciencias Geológicas (IUGS), ha seleccionado una serie de enclaves en todo el mundo, que sirven como referencia para estudiar algunos de esos periodos, en los que se coloca un clavo dorado. En la actualidad, existen solo 67 clavos, de los cuales, cinco se encuentran en España, uno de ellos en Fuentelsaz. Los estratotipos, señaló, son por tanto, completos patrones de referencia que sirven a los científicos para hacer comparaciones con otros lugares que no cuentan con un registro tan continuo. Según la Subcomisión Nacional de Estratigrafía estos lugares tienen que seguir tres criterios: Deben ser claros, útiles y precisos.

El investigador del IGME, Luis Carcavilla, que lleva casi una década trabajando para que este emplazamiento se proteja adecuadamente, indicó que Fuentelsaz alberga el mejor registro de fósiles y el más continuo del tránsito del Jurásico inferior al medio, hace 175 millones de años, por lo que si un investigador encontrase un fósil de este periodo en cualquier lugar del mundo, tendría en Fuentelsaz la referencia para su estudio y para hacer una datación bastante precisa del mismo.

Recordó que hace apenas unos meses se recibió una carta remitida por Stanley C. Finney, presidente de la ICS, en la que se ponía de relevancia "la grave situación" en la que se encuentra este estratotipo, que a pesar de ser el primero en recibir este reconocimiento en España, en el año 2000, no cuenta con una figura de protección adecuada y con los requerimientos establecidos por la IUGS para este tipo de emplazamientos, como la instalación de paneles explicativos destinados a la comunidad científica y al público general; la celebración de un acto inaugural en el que se proceda a la colocación del clavo dorado y una placa y la puesta a disposición de este emplazamiento para la investigación científica, trámites que sí se han llevado a cabo en el resto de los estratotipos españoles, a pesar de haber sido declarados con posterioridad, e instaba a abordar las medidas oportunas como requisito imprescindible para conservar esta consideración internacional.

También explicó el largo proceso que supuso su declaración por parte de este organismo internacional, en el año 2000. Fue propuesto en 1994, aceptado en 1998 y ratificado en el 2000, durante el 31nd International Geological Congress celebrado en Río de Janeiro.

La documentación necesaria para impulsar su candidatura fue elaborada por varios científicos de diversos centros de investigación nacionales, coordinados por el Dr. Antonio Goy y la Dra. María Soledad Ureta, de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y su validez como referencia fue contrastada por los máximos especialistas el mundo en este periodo, el Grupo de Trabajo del Aaleniense (AWG) de la Subcomisión Internacional de Estratigrafía del Jurásico (ISJS).

Este enclave rivalizaba con otra sección para el mismo límite, situada en Wittnau, en Freiburgo (sur de Alemania). Entonces, una comisión formada por 32 especialistas se desplazó a ambos emplazamientos para determinar, finalmente, que la sección de Fuentelsaz constituía el registro más completo para el estudio científico de este periodo.

El gerente del Geoparque de la Comarca de Molina-Alto Tajo, Juan Manuel Monasterio, por su parte, señaló que el Geoparque de la Comarca de Molina-Alto Tajo pretende ser una herramienta de desarrollo para toda la comarca y que, precisamente, uno de los principales objetivos que inspiraron el proyecto hace casi diez años fue impulsar la protección de determinados enclaves de relevancia internacional como el Estratotipo de Fuentelsaz y el Bosque Petrificado de la Sierra de Aragoncillo. En este sentido, recordó a los vecinos de la localidad que poseen “un patrimonio único en el mundo” del que son sus principales gestores y tienen el deber de protegerlo y ponerlo en valor.

El profesor Sopeña, el principal responsable de que se haya formulado una pregunta en el Congreso de los Diputados, por parte del grupo parlamentario de UPyD, sobre la protección del estratotipo de Fuentelsaz, explicó, durante el periodo de preguntas, las dificultadas que se ha encontrado para que se proceda a la protección del Bosque Petrificado de la Sierra de Aragoncillo, que ha sufrido las consecuencias del expolio durante décadas.

En este sentido, señaló que es partidario de no divulgar o promocionar un emplazamiento hasta que no se cuenten con las medidas adecuadas de protección, aunque en determinadas ocasiones se hace preciso dar a conocer la importancia de un lugar para captar la atención de las administraciones e impulsar su protección. De esta manera, en los años 90 salía publicado un reportaje en “El País” sobre la importancia mundial de este lugar, sin ofrecer datos concretos de su ubicación, una medida que, según dijo, adoptó por “desesperación” y que “fue muy criticada”, pero que logró despertar el interés de los principales responsables en su protección, aunque décadas más tarde continúe sin protegerse.

La velada concluyó con un vino español y un aperitivo por cortesía del Ayuntamiento de Fuentelsaz.