Un grupo de voluntarios trabajan para limpiar el bosque de Valdenazar de ailanto

El domingo 13 de Marzo, 12 voluntarios y voluntarias se juntaron para erradicar ailanto del Bosque de Valdenazar. Esta actividad, una de las 30 que se realizaron a lo largo de toda la geografía española por el Día de las Especies, era una iniciativa de la Xarxa de Custodia del Territori y la Obra Social "la Caixa" dentro de su programa "Tejiendo Redes por la Custodia del Territorio".

Una vez más, el Bosque de Valdenazar volvía a ser lugar de encuentro para los amantes del medio ambiente. El acuerdo de custodia verbal que mantienen el Ayuntamiento de Yebes y la Asociación Micorriza daba lugar a una nueva actividad con la que alcanzar los objetivos de mantener y mejorar el estado de conservación de este bosque mixto mediterráneo. En esta ocasión, la jornada estaba dedicada a la protección de las especies autóctonas, y en Valdenazar estas tienen un enemigo muy temido, el Ailanto.

El Ailanto (Ailanthus altissima) es un árbol originario de China, pero que debido a la globalización se ha extendido y naturalizado por todas las regiones templadas de ambos hemisferios. Esta planta está catalogada como especie invasora en numerosos catálogos y documentos, tanto a nivel internacional, europeo, nacional e, incluso, a nivel regional en varias comunidades autonómicas.

De esta manera, y tras una breve introducción para presentar las entidades participantes, la historia de este paraje y el acuerdo de custodia que presenta en la actualidad y las principales características del ailanto, el grupo se desplazó al lugar de mayor presencia de esta planta invasiva. Durante más de 2 horas, los y las voluntarios/as trabajaron sin descanso en la erradicación de raíz de las plantas de ailanto que se iban localizando, ya que su alta capacidad de rebrote hace que esta sea la única manera ecológica eficiente contra su expansión. En total se arrancaron alrededor de 200 pies de diferentes tamaños y edades, y se eliminó la parte aérea de aquellos que no dio tiempo a quitar para dificultar su expansión. Toda la vegetación extraída se quemó controladamente debido a la dificultad para trasladarla hasta el punto limpio y persiguiendo que nada volviese a rebrotar.

Tras un más que merecido descanso y un pequeño aperitivo cortesía del Ayuntamiento de Yebes, se recogieron las herramientas y el grupo se dirigió a conocer el Bosque de Valdenazar. Los técnicos de Micorriza fueron interpretando el paisaje y remarcando los puntos más importantes por los que merece la pena conservar este espacio en custodia, a la vez que se recolocaron las 5 cajas nido para paseriformes que se habían instalado dos semanas atrás.

A la vuelta, y tras cerciorar que el fuego que se había realizado no corría peligro de reavivarse, el grupo se despidió con la sensación de que quedaba un trabajo bien hecho, pero que es sólo el comienzo para sacar este peligroso vecino del Bosque de Valdenazar.