Emily es una muñeca que estas navidades enseñará a los más pequeños a que "la vida real también es así". La muñeca es un producto de 'Amanda Pocket y sus amigos', protagonista de una casa de muñecas en la que conviven familiares y amigos en distintas situaciones.
El objetivo de este tipo de juguetes es "enseñar a los niños que hay personas que no pueden andar, así como otras no pueden hablar o simplemente no son igual que ellos, porque la vida a veces nos lleva por caminos que no podemos elegir", como puede leerse en el catálogo navideño que ha elaborado la marca Imaginarium.
"Cuando somos pequeños asumimos mucho mejor las diferencias que cuando crecemos", por lo que, con esto, "los niños tienen mucho que enseñar a los adultos".
Según explicó a Servimedia la responsable de Marketing de Europa Sur de la citada marca, María Nalda González, estos juguetes con valores suponen "alternativas a los ratos que los niños pasan delante de la pantalla" para "fomentar relaciones y conectarse a la diversión de verdad", también a la naturaleza y a los amigos.
El catálogo, que sigue un concepto de 'blog' pero también está diseñado para que los niños recorten, pinten y escriban, recoge las experiencias reales de familias y niños que han probado los juguetes.
En el caso de Emily una madre cuenta en el catálogo que su hijo de cuatro años le preguntó por qué estaba sentada en una silla de ruedas, por lo que la mujer decidió que "ya era hora" de enseñarle "que la vida a veces nos lleva por caminos que no podemos elegir".
"Emily va en esa silla porque no puede caminar. Seguramente ha sufrido algún accidente que hace que sus piernas no funcionen o quizá nació así. Igual que tú llevas gafas porque no puedes ver sin ellas, ella no puede moverse si no lo hace con su silla de ruedas", le dijo.