El vino Finca Río Negro de Cogolludo obtiene 93 puntos en la Guía Peñín

La Bodega Finca Río Negro, empresa asociada a CEOE-CEPYME Guadalajara, ha obtenido 93 puntos en su Finca Río Negro 5º Año, 92 puntos en su Finca Río Negro 2013 y 91 puntos en su 992 FRN 2015, en la edición de 2018 de la prestigiosa Guía Peñín. Publicación que, desde hace años se ha convertido en el anuario de referencia de los vinos españoles y donde, tanto profesionales del sector, como público en general se fijan a la hora de hacer su elección de esta bebida.

Una guía que se elabora tras la cata de más de 11.500 vinos de toda España y donde la cata, tanto de nariz como en boca, no dura más de 3 minutos. Y estos minutos han sido los que han hecho que Finca Río Negro esté entre los mejores de España, dentro de la categoría de “vinos únicos”, caracterizándose por ser vinos diferentes a los de su zona, añada y tipo. Además de tener unos registros olfativos y gustativos diferentes, por la tipología de clima y suelo donde crecen sus uvas.

Esta diferenciación, el ser un vino de altura, pues su viñedo se encuentra a más de 1.000 metros de altitud, hace de este vino alcarreño algo especial que se puede encontrar en establecimientos como El Bohío, El Club Allard, en Ramón Freixa, Zalacain o Monastrell, además de poder adquirir sus botellas en establecimientos como Lavinia, Sánchez Romero o la Bodega de Santa Cecilia, entre otros.

Fue en 1998 cuando la familia Fuentes decidió crear, las Bodegas Finca Río Negro, en Cogolludo, tierra de tradición vitivinícola que se encuentra en las estribaciones del Parque Natural de la Sierra Norte y a una inusual altitud de 1.000 metros, encontrándose el viñedo más cercano a 60 kilómetros. Con estas características las Bodegas Finca Río Negro logra hacer un vino único que se refleja en cada una de sus añadas.

Realizan una vendimia manual y, para la elaboración de sus vinos, utilizan, exclusivamente, las uvas de sus 42 hectáreas de viñedo, realizando todo el proceso productivo en su propiedad. Combinan el trabajo artesanal y manual en el campo, con las nuevas tecnologías en la bodega, con el principal objetivo de preservar la identidad del terruño y la calidad de sus vinos.