Santos López Tabernero, uno de los peores directores de Agricultura que ha tenido Guadalajara según Ecologistas en Acción

La proliferación de macrogranjas, el despoblamiento rural, la falta de medidas de conservación en espacios naturales o vías pecuarias, la vista gorda a determinados sectores, la gestión del incendio de Chiloeches o su postura respecto a los pobladores de Fraguas, representan la gestión de uno de los peores Directores Provinciales que han pasado por la Delegación.

Santos López Tabernero, director provincial de Agricultura y Desarrollo rural, desde el 2015, ha sido para Ecologistas en Acción de Guadalajara, uno de los peores delegados que ha pasado por nuestra provincia en materia medio ambiental. Consideramos que es corresponsable por inacción de la despoblación de nuestro medio rural, donde el descenso de personas de los pueblos ha sido el mayor en los últimos cuatro años. Incapaz de reunirse con los pobladores de Fraguas y solucionar un conflicto de fácil solución. Incapaz de evitar criminalizar a unos jóvenes que apostaron por un proyecto de repoblación en la Sierra Norte.

La lamentable gestión del incendio de Chiloeches, que tres años después del desenlace, el lugar está sin descontaminar y la Junta ha destinado millones de euros en los trabajos realizados por la empresa semipública TRAGSA, el escaso control de las plantas de tratamiento de residuos industriales y urbanos en nuestra provincia, y la autorización de nuevas plantas de gestión de industriales, tóxicos y peligrosos, no ha parado.

Cuatro años, donde el cumplimiento de la Ley de Vías Pecuarias de Castilla-La Mancha se ha ignorado. No se ha llevado a cabo ninguna clasificación ni deslinde de estos caminos públicos, y el numero de ocupaciones de estas vías, se ha multiplicado considerablemente.

Además, no se ha realizado ninguna medida ante la grave cantidad de masas de agua contaminadas por nitratos, donde Guadalajara cuenta con 124 municipios como zonas vulnerables por nitratos.

Los procesos simplificados de evaluación ambiental, se han incrementado, y las alegaciones presentadas por esta organización, no se tienen en consideración.

La tibieza con la que se ha tratado la reciente actuación de "restauración" del Rio Henares a su paso por la capital, ha sido otro de los actos que demuestran su escasa sensibilidad sobre los ecosistemas de ribera.

Un alto porcentaje de incendios forestales es provocado por cosechadores. Santos López Tabernero, pese a las propuestas y demandas realizadas por esta organización, no ha obligado a tomar medidas muy concretas, puntuales y baratas para extinguir los conatos producidos durante estos trabajos, como hacen otras comunidades autónomas.

Sus grandes apuestas por el desarrollo rural en nuestra provincia han sido:

La proliferación y masificación de la ganadería intensiva, apoyando, ayudando y apostando por macrogranjas de porcino, bovino y avícola, que ha multiplicado por tres su número de cabezas. Mientras la ganadería extensiva y los pequeños agricultores han ido dejando su actividad por falta de sustento, competitividad y rentabilidad, sin que el Gobierno Regional les haya ayudado.

El "arreglo" de caminos rurales. Las grandes inversiones para desarrollo rural de nuestros pueblos. Ampliar y ensanchar los caminos rurales, talar miles de arboles, realizar trabajos en época de alto incendio, con especies protegidas, destruyendo muros, cercas, tapias, acequias, y restos arqueológicos. Invadiendo terrenos privados, sin orden de expropiación. Millones de euros, que la empresa semipública TRAGSA, ejecutora de todos estos trabajos, sin subasta pública, se han encargado de embolsar, con escasas horas de trabajo e inversión.

La falta de presupuesto para ejecutar los Planes de Gestión de los espacios naturales de nuestra provincia, ponen en riesgo la conservación de esos espacios y un uso adecuado de los mismos.

La incapacidad de mantener las manadas de lobo en nuestra provincia, como una especie emblemática ibérica y única en nuestra región.

Para Ecologistas en Acción de Guadalajara, la etapa de Santos López nos deja un sabor agrio, donde los escasos contactos que hemos mantenido, ha sido siempre a petición de la organización ecologista, y las buenas palabras o anotaciones de mejoras, se han quedado en papel mojado. Algunas de las denuncias o petición de información que hemos interpuesto o solicitado, tampoco han sido atendidas.

"Consideramos que una persona que lidera una Dirección Provincial como la que nos ocupa, debe sentarse, hablar, escuchar y actuar en las competencias y materias que representa, que además de agricultura, caza y desarrollo rural, es el medio ambiente".