La DGT inicia en Guadalajara una campaña especial de control de distracciones al volante

La Dirección General de Tráfico (DGT) iniciará el 16 de septiembre una campaña especial de control de distracciones al volante, que se prolongará hasta el día 22 de este mismo mes. Debido al alto porcentaje de accidentes que se producen por esta causa en carreteras convencionales, se reforzará la vigilancia en este tipo de vías con la presencia de patrullas integrales de motoristas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. También se ha sumado a ella el Ayuntamiento de Alovera.

En una campaña desarrollada el año pasado en fechas similares, fueron controlados cerca de 1.500 vehículos, de los cuales 76 resultaron denunciados por distracciones al volante. El principal motivo fue el uso del teléfono móvil, con un total de 39 denuncias.

Según recuerda la DGT, las distracciones son un factor concurrente en al menos uno de cada tres accidentes con víctimas que se producen en vías interurbanas, fundamentalmente por el uso indebido de teléfonos móviles, navegadores GPS u otros dispositivos. El uso del móvil durante la conducción aumenta entre cuatro y seis veces el riesgo de accidente, hasta el punto de que algunos estudios lo equiparan al de hacerlo bajo los efectos del alcohol.

De hecho, la distracción fue un factor concurrente en los tres accidentes con víctimas mortales registrados en Guadalajara en lo que va de año, al igual que en nueve de los 18 accidentes con heridos graves. El año pasado, la distracción del conductor fue un factor concurrente en 10 de los 28 accidentes con heridos graves, y en dos de los siete accidentes con fallecidos.

Marcar un número de teléfono, responder a una llamada y leer o contestar mensajes de texto mientras se conduce supone apartar la vista de la carretera durante un tiempo en el que el vehículo circula sin control y pueden surgir circunstancias que provoquen un grave accidente. Cuanto mayor es la velocidad, menor margen de reacción tiene el conductor frente a los imprevistos. A 120 kilómetros por hora, en tres segundos se recorre una distancia superior a la de un campo de fútbol.

Distracción y velocidad.-

Por tanto, distracción y velocidad se convierten en un binomio que aumenta muy significativamente los niveles de riesgo durante la conducción. El tipo de accidente más frecuente debido a la distracción es la salida de la vía, choque con el vehículo precedente o atropello.

A pesar de percepción del riesgo, un gran porcentaje de conductores reconoce que usa el teléfono móvil mientras está al volante, según la Encuesta europea sobre las actitudes de seguridad de los usuarios de la carretera (ESRA). Este porcentaje es particularmente alto entre los menores de 34 años. Además, el hecho de que el uso de teléfonos de manos libres sea legal da la falsa impresión de que es seguro, por lo que los conductores lo hacen sin ser conscientes del efecto de distracción de las llamadas con un teléfono de manos libres. Tras un minuto y medio de hablar por el móvil (incluso con manos libres) se dejan de percibir el 40% de las señales. También el uso del teléfono móvil por los peatones provoca distracción y aumenta el riesgo de atropello.

La Ley del Permiso por puntos establece que conducir utilizando manualmente el teléfono móvil, cascos, auriculares o cualquier otro dispositivo incompatible con la obligación de atención permanente a la conducción, supone la pérdida de tres puntos, además de una multa de 200 euros. Pese a ello, en los diez primeros años de implantación del permiso por puntos, el 10% de las sanciones impuestas tuvieron como causa la utilización el teléfono móvil u otros dispositivos de sonido durante la conducción.