Un sistema sifónico acabará con los malos olores de la red de alcantarillado del sector 10 de Yebes

Tratar de acabar con los malos olores que provocan las emanaciones procedentes del sistema de aguas residuales domésticas a través de los imbornales de la red de saneamiento.

Es el objetivo del proyecto que se va a ejecutar en las siete calles del Sector 10 del casco urbano de Yebes y que ha sido adjudicado por el Servicio de Contratación de Obras de la Diputación de Guadalajara con cargo al Plan de Obras y Servicios que promueve esta institución para dotar a los municipios de la provincia de un nivel de infraestructuras que permita conseguir una mayor calidad de vida en el medio rural. El proyecto tiene un plazo de ejecución de tres meses y ha recaído en la empresa Probisa Vías y Obras por un importe de 80.000 €, de los que esta institución aporta 66.625,41 € y el resto corre a cargo de la Tesorería municipal. Consistirá en la transformación de los sumideros existentes en sifónicos, además de la puesta a cota de las tapas precisas para realizar la pavimentación de las calles afectadas.

Al contrario que en el resto del pueblo, en este sector urbanístico de Yebes cuyo desarrollo se inició en 2005 se construyó una deficiente red de alcantarillado que presenta un único conducto de sumideros combinados. Es decir, las conducciones de aguas pluviales y fecales procedentes de las viviendas situadas en esta zona se comparten a través de un sistema unitario de evacuación que mezcla ambos saneamientos.

Tiene como principal ventaja el menor coste económico de instalación y mantenimiento al presentar un único conducto. Por contra, si hay un periodo prolongado de sequía esta tubería solo porta aguas residuales, que al tener un volumen reducido de caudales origina una especie de embolsamiento, que termina por acumularse en esta conducción. “Lo que provoca el encharcamiento de las aguas fecales y, por consiguiente, su evaporación en forma de gases que buscan la salida por los imbornales, con el consiguiente mal olor en la calle”, explica Vidal Gaitán, concejal de Urbanismo.

Este inconveniente se va a intenar solventar reemplazando los actuales sumideros por un sistema de imbornales sifónicos en todos y cada uno de estos canales, que irán equipados con un tapón hidráulico. En total se va a actuar en los 83 sumideros que se localizan en las calles Río Gallo, Río Dulce, Río Sorbe y Río Ungría, así como en las calles Río San Andrés, Río Jarama y Fuente el Palomar.

“Se construirá una canalización en forma de sifón invertido que se dotará de un tapón hidráulico que dispondrá de una cantidad suficiente de agua para evitar que los malos olores afloren por los sumideros”, detalla el concejal de Urbanismo. Así, cuando el vapor procedente de las aguas residuales suba por la conducción, se encontrará con el agua y evitará que los gases asciendan a la superficie por los imbornales de las calles. En verano bastará con echar un poco de agua a través del sumidero de la red de alcantarillado para poner fin al problema, puesto que el resto del año y con el régimen normal de lluvias este sistema se mantiene solo.

La empresa adjudicataria tendrá que romper los 83 imbornales existentes en las calles del Sector 10 de Yebes para instalar en cada uno de ellos este sistema sifónico. Una vez finalizados estos trabajos, el pavimento será restituido a su estado original.