Innovadores tratamientos contra la procesionaria logran una notable reducción de nidos en Cabanillas del Campo
El Ayuntamiento de Cabanillas del Campo ha implementado recientemente un conjunto de tratamientos destinados a combatir la procesionaria, logrando resultados sorprendentes. La combinación de trampas de feromonas, endoterapia y fumigaciones puntuales ha permitido reducir la presencia de nidos en un 80% en comparación con años anteriores, lo que promete una primavera más tranquila tanto para los viandantes como para sus mascotas.
Resultados esperanzadores para la próxima primavera
Los especialistas han destacado que los novedosos métodos aplicados durante el último otoño-invierno están dando frutos positivos. Las trampas de feromonas, instaladas para atrapar a las mariposas que emergen al final del verano, son uno de los elementos clave en esta estrategia. Además, desde noviembre se han estado realizando tratamientos de endoterapia, que consiste en inyecciones en los troncos de los árboles, especialmente en áreas cercanas a parques infantiles y espacios para perros.
Por otro lado, se continúan aplicando fumigaciones puntuales en zonas donde se ha detectado mayor resistencia, así como labores de retirada y quema de bolsones. Estas acciones han contribuido significativamente a la disminución de los nidos de procesionaria.
Precauciones ante posibles riesgos
A pesar del éxito obtenido, el Ayuntamiento advierte que es posible que algunos nidos resistentes puedan aparecer durante la próxima primavera. Este fenómeno podría dar lugar a las conocidas “procesiones” de orugas, cuando descienden de sus nidos para enterrarse en el suelo y completar su ciclo vital. Este momento es considerado el más peligroso del ciclo debido a los pelos urticantes que poseen las orugas, capaces de provocar reacciones alérgicas severas al contacto con la piel o mucosas. Esta situación representa un riesgo particular para niños y mascotas.
Ante cualquier incidente relacionado con el contacto con estas orugas, se recomienda acudir inmediatamente a un profesional sanitario. El consistorio también hace un llamado a los propietarios de parcelas privadas con coníferas para que adopten medidas preventivas similares, como la retirada y quema de bolsones, contribuyendo así a controlar la población de estas orugas.